Nueve alimentos superaron el 20% de incremento en las primeras tres semanas de julio y un décimo quedó en el borde de ese valor. Las mayores alzas aparecen en los sectores con mayor concentración de la ofertaa. La información surge de un relevamiento del Centro de Almaceneros, Autoservicios y Comerciantes Minoristas de Córdoba. También se produjeron faltantes o provisión acotada de productos.
El top 10 es liderado por el aceite de girasol con un 47,86% de aumento; lo siguen la harina de trigo 000, 42,99%; mermelada en frasco, 39,02%; fideos secos (de todos los tipos), 37,20%; queso para rallar Reggianito, 33,55%; caldo concentrado, 24,47%; Azúcar blanco tipo A, 21,92%; Café (Torrado Molido), 21,13%; galletitas saladas (de agua), 20,51%; galletitas dulces, 19,74%.
Semejantes subas se produjeron a partir de la salida del ministro de Economía, Martín Guzmán, y la llegada de la nueva ministra, Silvina Batakis, ocurrida a principios de julio. Como se puede ver en la lista los mayores saltos se producen en las cadenas con mayor concentración: aceites, harinas y azúcar, pero se puede observar un alza generalizada.
El gerente del Centro de Almaceneros, Autoservicios y Comerciantes Minoristas de Córdoba, Germán Romero señaló a ENREDACCIÓN que los aumentos fueron de todos los proveedores, sin excepción. “Los incrementos fueron prácticamente iguales en todas las marcas. Claro que en aceites, harinas y azúcar los proveedores no son muchos”.
También precisó que “con el mismo criterio, las empresas proveedoras de éstos commodities (aceites, harinas y azúcar) fueron los que más incrementaron su precio. A pesar de estar contempladas algunas de sus marcas en el Programa Precios Cuidados (y que no están en stock en grandes superficies) aparecieron solo aquellos productos que no están incluidos en el mismo con “sustanciales” subas”.
Respecto de la entrega de productos, indicó que “desde los primeros días de julio, es totalmente atípica. Las mayores dificultades se presentan en aceites (recién a fines de la semana pasada (viernes 22) comenzó a entregarse en cantidades mínimas y con un precio muy superior, seguido de azúcar y harinas (entregas de 1 bulto –es decir 10 unidades por comercio), y farináceos en general (pastas secas, galletas dulces y saladas) cuyas entregas son por lo general entre un 30% y 40% del pedido. Incluso lácteos, gaseosas, cervezas (tanto en proveedores mayoristas como en la distribución domiciliaria) se encuentran acotadas a un 50%-60% de lo habitual”.
Según la medición, el promedio de incremento de los alimentos básicos, sin estacionales, fue en 21 días de 13,84%. Mientras que la Canasta Básica Alimentaria (CBA) aumentó un 9,06%, unos 4913 pesos. La CBA impacta directamente sobre la línea de indigencia.
VER VARIACIONES DE PRECIOS 01 AL 21-07-22.
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