La derrota en Boedo lo deja a Instituto en una situación delicada. Con la serie 3 a 2 a favor de San Lorenzo, los cordobeses están obligados a ganar los dos partidos que quedan para alcanzar el título. El primero será esta noche desde las 21 horas en el Ángel Sandrín, y si consigue la victoria, el decisivo séptimo juego se jugaría el jueves 4 en Boedo.
Por primera vez en la final de la Liga se presentaron diferencias considerables en el marcador: San Lorenzo fue una locomotora en el segundo tiempo y metió un parcial de 61 puntos en 20 minutos para estampar el 96-80 final sobre Instituto y el consecuente 3-2 para quedar a tiro de la final. Luego del compromiso charlamos con Luciano González , el goleador de Instituto, sobre este Juego 5.
Con esta derrota están obligados a ganar los dos partidos que quedan, ¿Cómo ves al equipo para esta situación limite?
Estamos bien. Tenemos que ir a defender nuestra localía, no queda otra. Ahora sí, estamos contra las cuerdas, y tenemos que ganar el juego 6 como sea, jugando bien o no tan bien para poder volver a Buenos Aires y tener una última chance. No será fácil, pero somos consientes de que hay que jugar al límite.
¿Cuál crees que fue la diferencia principal con respecto a los otros juegos?
Creo que a diferencia de los otros juegos, se les abrieron todas las vías de gol posibles. El “Penka” (Nicolás Aguirre) con anotación y generación de juego; los internos dominando en el poste bajo y encontrando buenos tiros; y cuando se juega así, contra un equipo como San Lorenzo se hace muy difícil. Metieron 61 puntos en el segundo tiempo, que no había pasado en toda la serie, pero bueno, es muy complicado dejarlo a San Lorenzo todos los partidos debajo de 80 puntos. Hoy nos vamos con una derrota que nos duele, pero hay que levantar la cabeza porque tenemos el juego 6 por delante.
¿Por qué crees que al equipo le costó tanto la generación ofensiva en el tramo decisivo?
Es un juego un poco mental, un poco de sentirse cómodo. Nosotros nos sentimos más cómodos jugando de local, y ellos se sienten más cómodos jugando en Buenos Aires. Tratamos de revertir esa situación, de venir a jugar a esta cancha y jugar con la fluidez que traíamos de Córdoba, pero ellos anduvieron bien todo el partido. Si bien en el primer tiempo nos fuimos ganando por un punto, nos permitieron hacer solo 36; entonces nunca pudimos despegarnos. La bronca que queda , es el segundo tiempo, que nos metieron muchísimos puntos.
Luciano González lanza ante la marca de Vildoza. (Foto: LNB).
En el juego 4, Facundo Muller decidió poner al “Chuzo” en el quinteto titular por primera vez en la temporada ¿El motivo? arrancar mejor en el primer cuarto, ya que “La Gloria” no pudo ganar ningun cuarto inicial en los tres primeros partidos. La estrategia funcionó y el equipo ganó los dos siguientes primeros cuartos con el ingreso de González. El tema es que en su producción individual, el escolta de Instituto disminuyó considerablemente en sus números:
Juego 1: 17 puntos, 35% de campo y 3 triples.
Juego 2: 20 puntos, 53% de campo y 3 triples.
Juego 3: 15 puntos, 22% de campo y 0-8 en triples.
Juego 4: 8 puntos, 42% de campo y 0-3 en triples.
Juego 5: 16 puntos, 36,9% de campo y 1-3 en triples.
Particularmente, desde que entraste en el quinteto titular, has bajado un poco tu producción anotadora, ¿Qué diferencias encontras con salir desde el banco?
Y, ellos defienden muy bien. La única ventaja que tenía yo cuando salía desde el banco era que sabía de antemano cómo defendían ellos y veía por donde era mejor opción para atacar. Después, la realidad es que en los últimos dos juegos conmigo de titular, el equipo funcionó bien y luego Santiago (Scala) entró muy bien desde el banco. Entonces la decisión táctica salió bien, porque era para poder arrancar con ventaja en el juego.
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