Qué hay detrás de la resolución que originó el conflicto con los pilotos de líneas aéreas

La aviación aerocomercial argentina está sometida a la presión desreguladora del gobierno nacional. La desregulación tiene tres planos, que deben actuar armónicamente para que el sistema funcione: el ingreso de compañías de bajo coste o low cost en el mercado de cabotaje, la salida de Aerolíneas Argentinas de rutas internacionales fundamentales para los intereses del país y su reducción o desaparición como aerolínea de bandera, y la flexibilización de las normas laborales. Como la discusión que suele darse con la producción de gas y petróleo, entre los que apuestan a la existencia de una empresa estatal (YPF) o la inversión extranjera en el sector, el de la aviación tiene en términos generales esa misma matriz, esto es, están los que consideran necesaria una línea de bandera (Aerolíneas) para garantizar la independencia del sistema de transporte nacional y los que piensan que ese es un concepto anticuado que frena el desarrollo del sector.

VER MÁS ARTÍCULOS DE FABIÁN GARCÍA.

VER Autorizan a Flybondi y otras compañías a contratar pilotos extranjeros y paran los argentinos.

Como la escala es la base de cualquier negocio, en cualquier rama de producción o servicios, Aerolíneas Argentinas es un escollo para el desarrollo de las empresas privadas low cost en Argentina y para las compañías internacionales en el segmento de los viajes desde y hacia el país. El costo laboral es el otro condicionante del modelo: con el valor de los argentinos, el sistema low cost terminará desmoronándose. La receta es igual en todas partes del mundo: mercado desregulado (Tarifas), normas básicas de seguridad y flexibilidad laboral.

Por cierto, el valor de las empresas de bandera es que garantizan al país la comunicación interna o externa según los intereses nacionales. Por ejemplo, volar a la Patagonia para romper el aislamiento que producen las distancias. El valor de tener rutas aerocomerciales es ese, dado que no son infinitas y están reguladas internacional y nacionalmente. Es decir, no hay ilimitadas rutas a Europa, a Estados Unidos o a África. Lo mismo sucede dentro del país. Básicamente existen límites por seguridad e infraestructura, por un lado, y por saturación del mercado, por otra, que motivan esa finitud.

¿Cuál es el contexto? El gobierno del presidente Mauricio Macri amagó en estos tres años con presentar un paquete de leyes de flexibilización laboral en el Congreso, con el objetivo de reducir los costos laborales directos e indirectos de modo general para todos los sectores, pero en realidad hizo acuerdos por sectores. Así sucedió con los petroleros en Vaca Muerta o con los lecheros en Sancor o con algunas terminales automotrices que introdujeron adendas a las convenios colectivos que tienen vigencia para las nuevas inversiones, generando la existencia de trabajadores de primera y trabajadores de segunda. Es decir, por arriba todo sigue igual, pero por abajo se van modificando las condiciones laborales, salariales y de protección social. Hasta ahora, la estrategia ha sido exitosa.

Sin embargo, con los gremios aeronáuticos el gobierno ha encontrado un tope, al menos temporal. La resolución ahora derogada, la 895/2018 permitía que pilotos extranjeros, que hasta este momento sólo podían pilotar temporalmente a los fines de preparar las tripulaciones nacionales de aviones comerciales, a ser comandantes de los vuelos locales. La medida permitía fisurar a los sindicatos de pilotos y a los convenios colectivos que rigen su actividad, permitiendo contratar pilotos con otras condiciones laborales -entre ellas, las exigencias para aprobar las licencias, que son sumamente costosas-. La decisión oficial tenía otro objetivo: como aquí no sobran pilotos, por eso -entre otras razones- sus salarios son más elevados, la llegada de comandantes incrementaría la oferta y con el tiempo ayudaría a disminuir la planilla salarial.

Pablo Biró, secretario General de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), explicó con claridad los alcances de la resolución 895/2018, a fines del año pasado: “Hay un claro intento de precarizar y destruir el empleo argentino, y con ello el nivel de seguridad. La ANAC acaba de darle la posibilidad a las compañías que contraten pilotos extranjeros, algo que no existía en nuestra legislación y está prohibido por el Código Aeronáutico. Están permitiendo el ingreso y la validación automática de licencias pertenecientes a pilotos extranjeros, sin exámenes en la Argentina que acrediten seguridad”.

Dijo además que “ANAC modificó la interpretación de una norma que permite la contratación a modo temporal, y por un máximo de 180 días, de pilotos instructores para los casos de aviones nuevos, mientras dura la capacitación de los pilotos argentinos. Lo que están haciendo en Flybondi a partir de una nueva interpretación de esta norma es traer pilotos pero no como instructores, sino como comandantes”.

No se trata de un invento argentino. Las low cost europeas funcionan con pilotos de distintos países, sobre todo aquellos que tienen menor regulación laboral, por ejemplo, Irlanda. A su vez, a diferencia de nuestro país, los sindicatos son de empresa, que a su vez, están divididos por los países donde tienen centros de distribución y operaciones (los hub), lo que les reduce a los trabajadores la capacidad de negociación. Así, con sindicatos fragmentados, la negociación de normas laborales y salariales es a la baja por la debilidad estructural de las representaciones.

Por eso el Ministerio de Producción y Trabajo le dio personería al Sindicato de Flybondi. Si bien todavía no puede negociar convenio colectivo o paritarias salariales, implica un primer paso para descentralizar la negociación laboral, esquivando a los sindicatos por rama de actividad que funcionan en Argentina, que en el sector aerocomercial no acuerdan con la apertura de los cielos que timonea el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich. Como se ha visto, sindicatos únicos por rama de actividad no son una garantía de que no haya negociación flexibilizadora, pero son difíciles de quebrar cuando no están de acuerdo con esta hoja de ruta neoliberal. Eso es lo que sucede con los gremios aeronáuticos en este momento.

Las low cost desataron también una guerra de tarifas que llevará a la quiebra a compañías como Aerolíneas Argentinas, basadas en un modelo de negocio con mayor seguridad y estándares laborales elevados. Pero a su vez, las low cost requieren nomas flexibilizadas para no morir ellas mismas en el intento: la contratación de tripulaciones extranjeras y la existencia de sindicatos “amarillos” por empresa (no por el PRO), sino por su ideario colaboracionista del modelo neoliberal, van en ese camino.

EL MENSAJE DEL GOBIERNO PARA DEROGAR LA RESOLUCIÓN 895/2018

“El Ministerio de Transporte de la Nación a través de la ANAC, derogará la resolución 895/2018 publicada el 22 de noviembre del año pasado. Se hace en vistas de una nueva audiencia mañana a las 8 hs en las oficinas de la Secretaría de Trabajo para consensuar una nueva reglamentación y para asegurar los servicios aéreos de los días jueves y viernes, que suman 876 vuelos en los que viajan 96 mil pasajeros en plena temporada alta”.

“El artículo 106 del Código Aeronáutico es el que dice que la tripulación con funciones aeronáuticas debe ser argentina y a su vez permite que “un porcentaje” pueda ser extranjera “por motivos técnicos” por máximo un período de dos años”.

“La resolución 895/2018 simplifica y aclara las categorías de pilotos a las que pueden acceder los extranjeros. La norma anterior, se regía con categorías desactualizadas que no coincidían con las categorías establecidas en el propio Código Aeronáutico. Lo que hace la nueva norma es especificar categorías para simplificar un trámite”.

“El cambio que hizo la ANAC forma parte de un trabajo de aggiornamiento de normativa para actualizar las regulaciones del sector. Ésta en particular se pensó: para los instructores extranjeros puedan serlo con menos tiempo burocrático; y para que los pilotos argentinos que trabajaron en el extranjero y vuelven al país puedan revalidar su licencia en forma más ágil (lo que demoraba 40 días se pretende llevarlo a sólo 7)”.

—

[email protected]

@garciadelapampa

Cómo comunicarse:

Redacción: [email protected]

Lectores: [email protected]

Equipo de Investigación: [email protected]

Sumate a un equipo que hace PERIODISMO COMPROMETIDO. Te invitamos a APOYAR a ENREDACCIÓN con una SUSCRIPCIÓN MENSUAL. La SUSCRIPCIÓN te permite participar de los premios y beneficios de EL CLUB DE LA NOTICIA. Más información en Suscripción Digital.

—