El lector biométrico de huellas dactilares instalado en cada banca, garantizará que sólo los legisladores sean los que puedan votan.
Diputruchos, abstenerse. En la Legislatura Unicameral de Córdoba ya no habrá posibilidad de que alguien que no sea legislador pueda votar, a partir de la implementación y puesta en marcha del sistema electrónico de voto.
Ayer comenzó a utilizarse este sistema, íntegramente por la Universidad Tecnológica de Córdoba, que no solamente favorecerá la rapidez para el voto y el conteo de los legisladores durante las sesiones, sino que también introducirá un mecanismo de seguridad fundamental para garantizar transparencia.
El nuevo sistema funciona con tabletas electrónicas que ya fueron instaladas en las bancas. Será allí donde los legisladores dejarán sentados sus avales, rechazos o abstenciones a los proyectos de leyes que sean puestas en consideración.
El nuevo sistema funciona con tabletas electrónicas que ya fueron instaladas en las bancas. Será allí donde los legisladores dejarán sentados sus avales, rechazos o abstenciones a los proyectos de leyes que sean puestas en consideración.
Ya no se verá a los legisladores levantando las manos como escolares, ni al presidente haciendo el conteo para saber si una iniciativa cuenta con los votos suficientes para ser transformada en ley. La utilización del sistema deberá ser acordado en el marco de Labor Parlamentaria, pero se supone que se impondrá como lo habitual. Para eso habrá una modificación al reglamento interno del cuerpo.
También se instalaron los mismos dispositivos en el estrado del presidente del cuerpo, para el caso de que tenga que desempatar.
SÓLO PARA LEGISLADORES
Lo interesante de la novedad tecnológica es que incorpora un dispositivo clave para evitar fraudes legislativos: el lector de huellas digitales. Habrá uno instalado en cada una de las 70 bancas, al que se le sumará el de la Presidencia (para el caso en que sea necesario un desempate), lo cual impedirá que alguien que no sea legislador pueda registrar un voto.
Al inicio de la sesión, cada legislador deberá colocar su dedo pulgar en el lector biométrico, lo que habilitará el funcionamiento de la tableta y además verificará si hay quórum suficiente para iniciar la sesión.
En tanto, al momento de votar electrónicamente, los parlamentarios deberán validar su identidad en el lector de huellas digitales, y recién ahí les aparecerán en sus dispositivos las opciones para votar.
Lo interesante de la novedad tecnológica es que incorpora un dispositivo clave para evitar fraudes legislativos: el lector de huellas digitales. Habrá uno instalado en cada una de las 70 bancas, al que se le sumará el de la Presidencia (para el caso en que sea necesario un desempate), lo cual impedirá que alguien que no sea legislador pueda registrar un voto.
Una vez concluida la votación, el resultado se exhibirá en la pantalla led que ha sido también instalada, y el sistema confeccionará un acta en la que se respaldará el resultado con el nombre de cada uno de los legisladores consignando el voto realizado.
El hecho de que el sistema haya sido desarrollado localmente por la UTN permitirá facilitar futuras actualizaciones del software.
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