El presidente Javier Milei reiteró que vetará cualquier iniciativa legislativa que ponga en riesgo su política de déficit cero, tras la media sanción en la Cámara de Diputados de proyectos que proponen un aumento del 7,2% en los haberes previsionales y la continuidad de la moratoria previsional.
A través de su cuenta en la red social X, Milei calificó las medidas como “demagogia populista” y aseguró: “Nuestro compromiso es vetar cualquier cosa que atente contra el DÉFICIT CERO. Fin”. En reposteos, compartió críticas contra las diputadas del Pro Silvia Lospennato y María Eugenia Vidal, quienes se abstuvieron en la votación del incremento jubilatorio.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ya había adelantado la postura del Gobierno en dos ocasiones, advirtiendo que cualquier ley con costo fiscal sería vetada. El equipo económico, tras reunirse con el presidente de la Cámara baja, Martín Menem, estimó que los proyectos sobre jubilaciones y emergencia en discapacidad representarían un costo del 1,8% del PBI, equivalente a 12 mil millones de dólares. Francos reforzó esta posición durante un almuerzo con la Asociación Cristiana de Dirigentes de Empresa (ACDE), mientras la oposición reunía quórum en Diputados para debatir estas iniciativas.
Desde la oposición, el diputado de la Coalición Cívica Maximiliano Ferraro defendió la propuesta de aumento jubilatorio, argumentando que cuenta con “fuentes de financiamiento claras, concretas y sostenibles”, como el IVA a directores de empresas, Ganancias para Sociedades de Garantía Recíproca, fondos de entes cooperadores, ahorros por intereses del FMI, un fondo anticíclico y la reducción de gastos reservados de la SIDE. En tono irónico, Ferraro sugirió revisar los 29.000 millones de pesos destinados al vocero presidencial y legislador electo, Manuel Adorni.
Los proyectos aprobados incluyen un aumento del bono previsional de 70.000 a 110.000 pesos, un incremento del 7,2% en los haberes (excluyendo regímenes especiales) para compensar la inflación de enero de 2024, y la extensión de la moratoria previsional, que beneficia a miles de trabajadores, especialmente mujeres, con trayectorias laborales informales. También se debatieron la emergencia en salud pediátrica, impulsada por el conflicto salarial en el Hospital Garrahan, y el refuerzo de recursos para la Agencia Nacional de Discapacidad.
El Gobierno, sin embargo, mantiene una postura inflexible. “Son temas importantes, pero el Estado no los puede pagar salvo que vuelva a endeudarse o emitir. Y eso no va a pasar”, afirmó Francos.
UN VETO CON ANTECEDENTES
Esta no es la primera vez que Milei recurre al veto. En septiembre de 2024, vetó una ley que otorgaba un aumento jubilatorio por fuera de la fórmula oficial, decisión que fue celebrada con un asado en Olivos junto a 87 diputados que respaldaron la medida. Ahora, el Gobierno se prepara para repetir la jugada, mientras Francos defiende el rumbo económico y adelanta el envío al Congreso de una nueva Ley Penal Tributaria, parte de las reformas impulsadas por Milei tras las elecciones. “Salimos de terapia intensiva, estamos en terapia intermedia”, diagnosticó el jefe de Gabinete sobre la situación económica.
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